Una situación que preocupada al sector de la distribución en bloque y que no dudan en comparar con lo sucedido al inicio de la pandemia con el papel higiénico o la harina durante el confinamiento, ahora es con el arroz. El temor al desabastecimiento, por el paro de los camioneros y el impacto de la guerra de Ucrania y Rusia.

No obstante, grandes cadenas de supermercados han negado que exista falta de suministro. Uno de los primeros productos que ha mostrado una gran desde el inicio de la guerra ha sido el aceite de girasol, por lo que hace una semana se racionaliza en las cajas de los supermercados su venta para evitar devaste cimiento.

Es más fácil para el gobierno de Pedro Sánchez culpar a la guerra de lo que está pasando

¿El motivo? Ucrania es el mayor productor de aceite de girasol, sumado a la desconfianza de los consumidores, el paro de los camioneros, la brusca subida de los combustibles y la electricidad han sido la ecuación desencadenante de este panorama. Sin embargo, el panorama se complica a un más con el aumento de los precios de la canasta básica de primera necesidad de los hogares españoles. Pero al parecer esto no se detendrá, ya que se augura que lo peor está por llegar y España podría registrar una inflación cercana al doble dígito por el encaramiento que están sufriendo los alimentos en los supermercados y los carburantes, inició 6 meses antes a que iniciaran los bombardeos en Ucrania.

No obstante, es más fácil para el gobierno de Pedro Sánchez culpar a la guerra de lo que está pasando, que mirar el problema de impuesto que tiene el país, el cual continúa aumentando gracias a sus medidas. Pero algo característico de este gobierno es culpar a otros de sus problemas que asumirlos.